“Te invitamos para que abras tú corazón al Señor con la lectura diaria del evangelio y una pequeña reflexión que te ayudara a crecer en la fe”.
Oración introductoria
Señor, si Tú quieres esta meditación puede hacer la diferencia en mi día, y en mi vida. Vengo ante Ti como el leproso, necesito de tu gracia. Tócame y sáname de todas mis iniquidades, de mi egoísmo, de mi soberbia, de mi vanidad, de mi indiferencia.
Petición
Ayúdame, Jesús, a vivir tu Evangelio al convertirme en un apóstol fiel y esforzado de tu Reino.
Propósito
Revisar mi programa de vida espiritual para concretar medios que me acerquen más a Cristo.
Diálogo con Cristo
Gracias, Jesús, por apiadarte de mis dolencias y darme la posibilidad de experimentar tu cercanía en esta meditación. Creo en tu misericordia y humildemente te pido me ayudes a saber reconocer todas mis infidelidades y a poner medios concretos para superarlas. Además confío en que sabré, como el leproso, divulgar tu Buena Nueva de salvación en mi entorno familiar y social, porque lo que más deseo para este 2012, es que muchos otros experimenten tu amor.
Autor: Miguel Ángel Andrés Ugalde | Fuente: Catholic.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario